Crítica de Novocaine (2025) – Acción, humor y corazón indoloro

 

Título:  Novicaine

País: Estados Unidos

Año: 2025

Director: Dan Berk, Robert Olsen

Duración: 110

Género: Comedia Negra

Novocaine es una de esas sorpresas que no ves venir. Dirigida por Dan Berk y Robert Olsen, la película combina acción, comedia y un peculiar enfoque humano a través de una premisa tan absurda como brillante: un hombre incapaz de sentir dolor se convierte, accidentalmente, en el héroe menos preparado y más resistent de la ciudad.

Jack Quaid interpreta a Nathan Caine, un tipo normal, torpe, más bien reservado, que padece una condición rara: no siente dolor físico. Y lo que podría parecer una desventaja se convierte en su principal herramienta cuando, de repente, se ve arrastrado a una situación límite. A partir de ahí, la película se desata en una espiral de persecuciones, golpes, peleas y situaciones delirantes que no pierden el pulso ni el sentido del humor.

Lo que realmente funciona en Novocaine es el tono. Sabe exactamente lo que quiere ser: una película de acción con corazón, humor absurdo y secuencias que rozan lo cartoon sin caer nunca en el ridículo. La dirección de Berk y Olsen es ágil, con escenas de acción limpias y muy físicas, pero siempre con un guiño de comedia negra que recuerda al cine gamberro de los años noventa, aunque actualizado al ritmo moderno.

Jack Quaid está estupendo en el papel principal. Se nota cómodo, con un equilibrio perfecto entre lo vulnerable y lo disparatado. No es un superhombre, y precisamente por eso funciona: se cae, se levanta, no se queja, y sigue adelante con cara de no creerse nada. Su manera de encajar cada golpe (literal y emocional) es parte del encanto de la película.

El guion apuesta por una estructura sencilla pero bien construida. Hay momentos de tensión real, pinceladas de crítica social sutil, y un romanticismo algo torpe pero honesto que se agradece. Aunque el desarrollo no rompe moldes, sí logra mantener el interés sin que la historia se desinfle.

Visualmente, la película destaca por su estética urbana, casi navideña en algunos tramos, lo que crea un contraste simpático con la violencia física que se desata. La música y el ritmo refuerzan ese tono medio entre el desenfado y la intensidad, sin cargar demasiado la mano.

Novocaine es una propuesta fresca, divertida y sorprendentemente tierna dentro de su envoltorio de acción y comedia. No inventa nada nuevo, pero todo lo que hace, lo hace bien. Jack Quaid brilla con un personaje único, y el dúo Berk-Olsen demuestra que se puede mezclar el humor, los golpes y un poquito de ternura sin caer en la fórmula fácil.

Poster: Filmaffinity