El Hombre Invisible (2020) - Reseña

Título: El Hombre Invisible
Año: 2020
Director/a: Leigh Whannell
Guión: Leigh Whannell
País: Australia

Terror: 👻👻
Intriga: 👻👻👻
Trama: 👻👻👻
Sangre: 👻

Sinopsis: Después de que su abusivo exnovio se suicide, la ingenua viuda Cecilia comienza a reconstruir su vida para mejor. Sin embargo, su sentido de la realidad se pone en tela de juicio cuando comienza a sospechar que su exnovio en realidad no está muerto como había pensado.


El Dark Univers, el concepto inicial de la Universal para volver a llevar a la gran pantalla a sus monstruos originales, murió con su primer intento, La Momia (2017), después de no conseguir lo esperado en taquilla.

Tuvo que venir el señor Jason Blum, referencia actual en el cine de terror, para que se volviese a plantear de una forma diferente el universo, y así poder seguir algo más allá con la vuelta de los montruos clásicos.


De esta forma, se introduce para esta "primera película", el reconocido en el género Leigh Whannell, por trabajos como 'Insidious: Capítulo 3' o 'Upgrade'  para dirigir y guionizar El Hombre Invisible (2020).

Elisabeth Moss como protagonista principal para una historia más cruda detrás de su género principal, tocando aspectos dramáticos y de tremenda actualidad. Un aspecto ya de por sí terrorífico, y poniéndonos en su piel desde su inicio. En este aspecto Elisabeth Moss está soberbia de inicio a fin.

La historia está bien presentada de inicio a fin, y es totalmente seria si la comparamos con otras cintas de Blumhouse, y por supuesto un carácter totalmente maduro si lo comparamos con un terror convencional como Insidious.

En el aspecto del terror muestra un estilo para todos los públicos, puesto que es lo necesario para la trama y el apartado dramático de la película. Aquí puede no agradar a nivel general, si esperas un terror simplón.

Al fin y al cabo fuera de lo que aporta la historia más dramática, y que hace que empatices algo más con la protagonista principal es un cinta de terror al uso, bien llevada. Aun así no deja la sensación de un antagonista a recordar, como en mí más humilde opinión necesita el universo de monstruos.